La Semana Santa es el período litúrgico más importante dentro del calendario cristiano, que conmemora los últimos días de la vida terrenal de Jesucristo, su pasión, muerte y resurrección.

Durante la Semana Santa, los fieles católicos participan en una serie de celebraciones litúrgicas que recuerdan los eventos clave de la Pasión de Cristo. Entre ellas se incluyen la Misa Crismal, donde se consagran los óleos santos utilizados en los sacramentos, y la Misa de la Cena del Señor, que conmemora la Última Cena de Jesús con sus discípulos, durante la cual instituyó la Eucaristía y el sacerdocio.

La Semana Santa comienza con el Domingo de Ramos, un día en el que recordamos la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén. Los fieles católicos llevan ramos de palma o de olivo en procesión, recordando cómo la multitud recibió a Jesús con alegría y esperanza.

El Jueves Santo conmemoramos la Última Cena de Jesús con sus discípulos. Durante esta cena, Jesús instituyó la Eucaristía, el sacramento central de nuestra fe católica. Además, Jesús realizó el Lavatorio de los Pies, un gesto de humildad y servicio que nos enseña el valor de la caridad y el amor al prójimo.

El Viernes Santo es un día de profunda reflexión y recogimiento, en el que recordamos la Pasión y Muerte de Jesús en la cruz. Jesús sacrificó su vida por amor a la humanidad, ofreciendo el perdón y la salvación a todos los que creen en Él. Aunque este día es de tristeza, también es una oportunidad para renovar nuestra fe y agradecer el sacrificio de Jesús.

En cuanto a la pregunta sobre la hora en que Jesús murió el Viernes Santo, los Evangelios nos dicen que Jesús fue crucificado alrededor de la hora sexta, es decir, al mediodía. Durante las tres horas siguientes, hubo tinieblas sobre la tierra, hasta que Jesús entregó su espíritu alrededor de la hora novena, es decir, a las tres de la tarde.

El Sábado de Gloria es un día de espera y preparación para la Resurrección de Jesús. Durante la noche, se celebra la Vigilia Pascual, la cual es la celebración más importante del año para los católicos. Durante esta celebración, se enciende el Cirio Pascual, se proclama la Palabra de Dios y se renuevan las promesas bautismales. Es un momento de gran alegría y esperanza, ya que nos preparamos para recibir la buena noticia de la Resurrección.

Fin de la Semana Santa

El Domingo de Resurrección es el día más importante de la Semana Santa, ya que celebramos la Resurrección de Jesús. También se le conoce como Domingo de Pascua, porque Jesús, al resucitar, venció a la muerte y nos abrió las puertas de la vida eterna. Es un día de gran alegría y esperanza, en el que recordamos que Jesús está vivo y presente en nuestras vidas.

La Resurrección de Jesús es el fundamento de nuestra fe cristiana y nos da la certeza de que, al creer en Él, también nosotros tendremos vida eterna. Es un momento para renovar nuestra fe y compartir la alegría de la Resurrección con nuestros seres queridos.

En conclusión, la Semana Santa es un tiempo de reflexión, recogimiento y celebración para los católicos. A través de los diferentes días y eventos, recordamos la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús, y renovamos nuestra fe en su amor y misericordia. Que esta Semana Santa sea una oportunidad para acercarnos más a Dios y fortalecer nuestra relación con Él.