Evangelio de Hoy Jueves 24 de Abril de 2025.
Como todos los días, hoy les traemos a ustedes la palabra del señor. Lecturas, Salmo, Aclamación, el Evangelio de Hoy Jueves 24 de Abril y la homilía diaria.
Al final del artículo encontrarán el comentario al Evangelio del día de hoy para todos aquellos que quieran leer una explicación del evangelio, y las homilías diarias.
Jueves de la octava de Pascua – Lectio Divina 264
Lecturas Bíblicas del día de Hoy
Primera Lectura de Hoy 24 de Abril

Libro de los Hechos de los Apóstoles 3, 11-26.
Como el paralítico curado por Pedro y Juan no se les despegaba, todo el pueblo, asombrado, corrió hacia ellos al pórtico de Salomón. Al ver a la muchedumbre, Pedro les dirigió la palabra:
«Israelitas: ¿Por qué les causa admiración esto y por qué nos miran de ese modo, como si por nuestro poder o nuestra virtud hubiéramos hecho andar a este hombre? El Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, el Dios de nuestros padres, ha glorificado a su siervo Jesús, a quien ustedes entregaron a Pilato, y a quien rechazaron en su presencia, cuando él ya había decidido ponerlo en libertad.
Rechazaron al santo, al justo, y pidieron el indulto de un asesino; han dado muerte al autor de la vida, pero Dios lo resucitó de entre los muertos y de ello nosotros somos testigos. El nombre de Jesús y la fe en él es lo que ha robustecido los miembros de este hombre al que están viendo y todos conocen. Esta fe es la que le ha restituido completamente la salud, como pueden observar.
Ahora bien, hermanos, yo sé que ustedes han obrado por ignorancia, de la misma manera que sus jefes; pero Dios cumplió así lo que había predicho por boca de los profetas: que su Mesías tenía que padecer.
Por lo tanto, arrepiéntanse y conviértanse, para que se les perdonen sus pecados y el Señor les mande el tiempo de la consolación y les envíe de nuevo a Jesús, el Mesías que les estaba destinado; aunque él tiene que quedarse en el cielo hasta la restauración universal, de la que habló Dios por boca de su profeta desde muy antiguo.
En efecto, Moisés dijo: El Señor Dios hará surgir de entre sus hermanos un profeta como yo. Escuchen todo cuanto les diga; quien no escuche al profeta, será expulsado del pueblo. Todos los profetas, a partir de Samuel, anunciaron igualmente estos días.
Ustedes son herederos de los profetas y beneficiarios de la alianza que Dios hizo con sus padres, cuando le dijo a Abraham: Tu descendencia será fuente de bendición para toda la humanidad. Para ustedes, en primer lugar, ha resucitado Dios a su siervo y lo ha enviado para bendecirlos y ayudarlos a que cada uno se aparte de sus iniquidades».
Salmo Responsorial de Hoy – Salmo 8, 2a y 5. 6-7. 8-9.
¡Qué admirable es, Señor y Dios nuestro,
tu poder en toda la tierra!
¿Qué es el hombre, para que de él te acuerdes,
ese pobre ser humano, para que de él te preocupes?
¡Qué admirable, Señor, es tu poder! Aleluya.
Sin embargo, lo hiciste un poquito inferior a los ángeles,
lo coronaste de gloria y dignidad,
le diste el mando sobre las obras de tus manos,
y todo lo sometiste bajo sus pies.
¡Qué admirable, Señor, es tu poder! Aleluya.
Pusiste a su servicio los rebaños y las manadas,
todos los animales salvajes,
las aves del cielo y los peces del mar,
que recorren los caminos de las aguas.
¡Qué admirable, Señor, es tu poder! Aleluya.

Aclamación antes del Evangelio
Aleluya, aleluya.
Éste es el día del triunfo del Señor,
día de júbilo y de gozo.
Aleluya.
Evangelio de Hoy Jueves 24 de Abril de 2025.
Evangelio según San Lucas 24, 35-48.
Cuando los dos discípulos regresaron de Emaús y llegaron al sitio donde estaban reunidos los apóstoles, les contaron lo que les había pasado en el camino y cómo habían reconocido a Jesús al partir el pan.
Mientras hablaban de esas cosas, se presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: «La paz esté con ustedes». Ellos, desconcertados y llenos de temor, creían ver un fantasma. Pero él les dijo: «No teman; soy yo. ¿Por qué se espantan? ¿Por qué surgen dudas en su interior? Miren mis manos y mis pies. Soy yo en persona. Tóquenme y convénzanse: un fantasma no tiene ni carne ni huesos, como ven que tengo yo». Y les mostró las manos y los pies. Pero como ellos no acababan de creer de pura alegría y seguían atónitos, les dijo: «¿Tienen aquí algo de comer?» Le ofrecieron un trozo de pescado asado; él lo tomó y se puso a comer delante de ellos.
Después les dijo: «Lo que ha sucedido es aquello de que les hablaba yo, cuando aún estaba con ustedes: que tenía que cumplirse todo lo que estaba escrito de mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos».
Entonces les abrió el entendimiento para que comprendieran las Escrituras y les dijo: «Está escrito que el Mesías tenía que padecer y había de resucitar de entre los muertos al tercer día, y que en su nombre se había de predicar a todas las naciones, comenzando por Jerusalén, la necesidad de volverse a Dios para el perdón de los pecados. Ustedes son testigos de esto».

Homilía de hoy Jueves 24 de Abril.
Homilía: Paz en Medio de la Duda.
El evangelio de hoy nos sitúa en el cenáculo, donde los discípulos compartían tanto sus temores como las primeras noticias sobre apariciones del Resucitado. En ese ambiente cargado de emociones contradictorias —esperanza incipiente y miedo persistente— se presenta Jesús con un saludo que es también un don: «Paz a ustedes».
Ante su presencia inesperada, surge el sobresalto. Los discípulos creen estar viendo un fantasma, proyección de sus deseos o temores. Esta reacción tan humana revela cuán difícil resulta para nuestra mente aceptar lo que trasciende nuestra experiencia ordinaria. La resurrección no encaja en nuestras categorías habituales y genera desconcierto.
Con infinita paciencia, el Señor se adapta a nuestra fragilidad. Muestra sus heridas, invita al contacto físico, come en su presencia. No reprocha la incredulidad, sino que ofrece evidencias que construyen un puente entre lo conocido y el misterio. Las heridas glorificadas constituyen su identificación más auténtica: es el mismo que sufrió, pero transformado.
Después de asegurar su identidad, Jesús abre sus mentes a la comprensión de las Escrituras. La resurrección no es un episodio aislado, sino la culminación de un designio anunciado desde antiguo. Todo el Antiguo Testamento —la Ley, los Profetas, los Salmos— cobra nueva luz a partir de este acontecimiento central.
Finalmente, los transforma de testigos pasivos en anunciadores activos. «Ustedes son testigos de estas cosas», les dice, convirtiéndolos en portadores de un mensaje que debe llegar «a todas las naciones».
También nosotros somos invitados hoy a reconocer al Resucitado en nuestras vidas, a permitir que ilumine nuestra comprensión de la historia y a convertirnos en testigos de su victoria sobre la muerte. Como a los discípulos, Jesús nos repite: «Paz a ustedes», ofreciéndonos la serenidad que solo puede brotar de la certeza pascual.
Evangelio de Hoy – Agradece
Evangelio-de-hoy.com agradece infinitamente al señor nuestro Dios por la fuerza que nos da cada día para seguir adelante. También le damos gracias a De La Mano del Señor por el asesoramiento; y los invitamos a visitar Santo Rosario y Evangelio de hoy para ver el Evangelio y Homilía de Hoy en video.
Los textos de la Sagrada Escritura utilizados en esta obra han sido tomados de los Leccionarios I, II y III, propiedad de la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica de la Conferencia Episcopal Mexicana, copyright © 1987, quinta edición de septiembre de 2004. Utilizados con permiso. Todos los derechos reservados. Debido a cuestiones de permisos de impresión, los Salmos Responsoriales que se incluyen aquí son los del Leccionario que se utiliza en México. Su parroquia podría usar un texto diferente.