Evangelio de Hoy Lunes 19 de Agosto.

Como todos los días, hoy les traemos a ustedes la palabra del señor. Lecturas, Salmo, Aclamación, el Evangelio de Hoy Lunes 19 de Agosto y la homilía diaria.

Al final del artículo encontrarán el comentario al Evangelio del día de hoy para todos aquellos que quieran leer una explicación del evangelio, y las homilías diarias.

Lunes de la XX semana del Tiempo ordinario – Lectio Divina 419

Lecturas Bíblicas del día de Hoy

Primera Lectura de Hoy

Libro de Ezequiel 24, 15-24.

El Señor me habló y me dijo: “Hijo de hombre, voy a arrebatarte repentinamente a tu esposa, que es el encanto de tus ojos; pero no llores ni hagas duelo ni derrames lágrimas; aflígete en silencio, sin hacer duelo; ponte el turbante y las sandalias; no te cubras la cara ni comas comida de duelo”.

Por la mañana estuve hablando a la gente y por la tarde murió mi esposa. A la mañana siguiente hice lo que el Señor me había mandado. Entonces me preguntó la gente: “¿Quieres explicarnos lo que estás haciendo?” Yo les respondí: “El Señor me ha dicho: ‘Dile a la casa de Israel que el Señor dice esto: Voy a profanar mi santuario, que es la causa del orgullo de ustedes, el encanto de sus ojos y el amor de su corazón.

Sus hijos e hijas morirán a espada. Entonces harán lo que Ezequiel ha hecho: no se cubrirán la cara ni comerán comida de duelo; seguirán con el turbante en la cabeza y las sandalias en los pies; no llorarán ni harán duelo; se consumirán por su culpa y se lamentarán unos con otros. Ezequiel les servirá de ejemplo; ustedes harán lo mismo que él ha hecho. Y cuando esto suceda, sabrán que yo soy el Señor Dios’ ”.

Palabra de Dios.


Salmo Responsorial de Hoy Deuteronomio 32, 18-19. 20. 21.

Abandonaron a Dios, que los creó
y olvidaron al Señor, que les dio la vida.
Lo vio el Señor, y encolerizado,
rechazó a sus hijos e hijas.
Abandonaron a Dios, que les dio la vida.

El Señor pensó: “Me les voy a esconder
y voy a ver en qué acaban,
porque son una generación depravada,
unos hijos infieles.
Abandonaron a Dios, que les dio la vida.

Ellos me han dado celos con un dios que no es Dios
y me han encolerizado con sus ídolos;
yo también les voy a dar celos con un pueblo que no es pueblo
y los voy a encolerizar con una nación insensata”.
Abandonaron a Dios, que les dio la vida.


Aclamación antes del Evangelio

Aleluya, aleluya.
Dichosos los pobres de espíritu,
porque de ellos es el Reino de los cielos.
Aleluya.


Evangelio de Hoy Lunes 19 de Agosto de 2024.

Evangelio según San Mateo 19, 16-22.

En aquel tiempo, se acercó a Jesús un joven y le preguntó: “Maestro, ¿qué cosas buenas tengo que hacer para conseguir la vida eterna?” Le respondió Jesús: “¿Por qué me preguntas a mí acerca de lo bueno? Uno solo es el bueno: Dios. Pero, si quieres entrar en la vida, cumple los mandamientos”. El replicó: “¿Cuáles?”

Jesús le dijo: No matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no levantarás falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre, ama a tu prójimo como a ti mismo.

Le dijo entonces el joven: “Todo eso lo he cumplido desde mi niñez, ¿qué más me falta?” Jesús le dijo: “Si quieres ser perfecto, ve a vender todo lo que tienes, dales el dinero a los pobres, y tendrás un tesoro en el cielo; luego ven y sígueme”. Al oír estas palabras, el joven se fue entristecido, porque era muy rico.


Homilía de hoy Lunes 19 de Agosto.

El Evangelio de hoy nos presenta el encuentro entre Jesús y un joven rico, una escena que nos invita a reflexionar profundamente sobre nuestras prioridades, nuestro apego a los bienes materiales y el verdadero significado del discipulado.

La escena comienza con una pregunta aparentemente simple pero profunda: «Maestro, ¿qué obra buena debo hacer para obtener la vida eterna?». Esta pregunta revela el anhelo del joven por algo más allá de lo material, un deseo de trascendencia que todos llevamos en nuestro corazón.

La respuesta inicial de Jesús es directa: «Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos». Jesús comienza recordando la importancia fundamental de la ley moral, el camino básico de la santidad que Dios ha trazado para todos.

Cuando el joven afirma que ha cumplido todos estos mandamientos, Jesús lo mira con amor. Este detalle es crucial, pues nos muestra que Jesús no busca condenar, sino guiar con amor hacia una vida más plena. Es desde este amor que Jesús le propone el siguiente paso: «Si quieres ser perfecto, ve, vende lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás un tesoro en el cielo; luego ven y sígueme».

Esta invitación de Jesús va al corazón del asunto. No se trata simplemente de cumplir externamente con unos mandamientos, sino de una entrega total, de poner a Dios en el centro de nuestra vida por encima de todo lo demás. Jesús invita al joven a liberarse de sus ataduras materiales para seguirlo con total libertad.

La reacción del joven es reveladora: «Al oír estas palabras, el joven se fue triste, porque tenía muchos bienes». Esta tristeza nos muestra el conflicto interior entre el deseo de seguir a Cristo y el apego a las seguridades terrenales. El joven reconoce la grandeza de la invitación de Jesús, pero no encuentra la fuerza para responder a ella.

Como discípulos de Cristo, este pasaje nos interpela profundamente. Nos invita a examinar nuestras propias vidas y preguntarnos: ¿Qué es lo que nos impide seguir a Cristo con total libertad? ¿Cuáles son nuestros «muchos bienes» a los que estamos tan apegados que nos entristece la idea de renunciar a ellos?

Este evangelio nos recuerda que el seguimiento de Cristo implica una decisión radical. No se trata de un mero cumplimiento externo de normas, sino de una entrega total del corazón. Jesús nos invita a poner nuestra confianza en Él por encima de cualquier seguridad material.

Al mismo tiempo, la mirada de amor de Jesús nos recuerda que esta invitación no viene de un juez severo, sino de un Padre amoroso que desea nuestra verdadera felicidad. La renuncia que Jesús nos pide no es un fin en sí misma, sino un medio para liberarnos y poder seguirlo con todo nuestro ser.


Evangelio de Hoy – Agradece

Evangelio-de-hoy.com agradece infinitamente al señor nuestro Dios por la fuerza que nos da cada día para seguir adelante. También le damos gracias a De La Mano del Señor por el asesoramiento; y los invitamos a visitar Santo Rosario y Evangelio de hoy para ver el Evangelio y Homilía de Hoy en video.

Los textos de la Sagrada Escritura utilizados en esta obra han sido tomados de los Leccionarios I, II y III, propiedad de la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica de la Conferencia Episcopal Mexicana, copyright © 1987, quinta edición de septiembre de 2004. Utilizados con permiso. Todos los derechos reservados. Debido a cuestiones de permisos de impresión, los Salmos Responsoriales que se incluyen aquí son los del Leccionario que se utiliza en México. Su parroquia podría usar un texto diferente.