Evangelio de Hoy Lunes 29 de Diciembre de 2025.
Como todos los días, hoy les traemos a ustedes la palabra del señor. Lecturas, Salmo, Aclamación, el Evangelio de Hoy Lunes 29 de Diciembre y la homilía diaria.
Al final del artículo encontrarán el comentario al Evangelio del día de hoy para todos aquellos que quieran leer una explicación del evangelio, y las homilías diarias.
Quinto día dentro de la octava de Navidad – Lectio Divina 202
Lecturas Bíblicas del día de Hoy
Primera Lectura de Hoy 29 de Diciembre.

Primera Carta de San Juan 2, 3-11.
Queridos hermanos: En esto tenemos una prueba de que conocemos a Dios, en que cumplimos sus mandamientos.
El que dice: «Yo lo conozco», pero no cumple sus mandamientos, es un mentiroso y la verdad no está en él. Pero en aquel que cumple su palabra, el amor de Dios ha llegado a su plenitud, y precisamente en esto conocemos que estamos unidos a él.
El que afirma que permanece en Cristo debe de vivir como él vivió. Hermanos míos, no les escribo un mandamiento nuevo, sino un mandamiento antiguo, que ustedes tenían desde el principio.
Este mandamiento antiguo, es la palabra que han escuchado, y sin embargo, es un mandamiento nuevo éste que les escribo; nuevo en él y en ustedes, porque las tinieblas pasan y la luz verdadera alumbra ya.
Quien afirma que está en la luz y odia a su hermano, está todavía en las tinieblas. Quien ama a su hermano permanece en la luz y no tropieza. Pero quien odia a su hermano está en las tinieblas, camina en las tinieblas y no sabe a dónde va, porque las tinieblas han cegado sus ojos.

Salmo Responsorial de Hoy – Salmo 95, 1-2a. 2b-3. 5b-6.
Cantemos al Señor un nuevo canto,
que le cante al Señor toda la tierra;
cantemos al Señor y bendigámoslo.
Cantemos la grandeza del Señor.
Proclamemos su amor día tras día,
su grandeza anunciemos a los pueblos;
de nación en nación, sus maravillas.
Cantemos la grandeza del Señor.
Ha sido el Señor quien hizo el cielo;
hay gran esplendo en su presencia
y lleno de poder está su templo.
Cantemos la grandeza del Señor.

Aclamación antes del Evangelio
Aleluya, aleluya.
Tú eres, Señor, la luz que alumbra a las naciones
y la gloria de tu pueblo, Israel.
Aleluya.
Evangelio de Hoy Lunes 29 de Diciembre de 2025.
Evangelio según San Lucas 2, 22-35.
Transcurrido el tiempo de la purificación de María, según la ley de Moisés, ella y José llevaron al niño a Jerusalén para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley: Todo primogénito varón será consagrado al Señor, y también para ofrecer, como dice la ley, un par de tórtolas o dos pichones.
Vivía en Jerusalén un hombre llamado Simeón, varón justo y temeroso de Dios, que aguardaba el consuelo de Israel; en él moraba el Espíritu Santo, el cual le había revelado que no moriría sin haber visto antes al Mesías del Señor. Movido por el Espíritu, fue al templo, y cuando José y María entraban con el niño Jesús para cumplir con lo prescrito por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios, diciendo:
«Señor, ya puedes dejar morir en paz a tu siervo,
según lo que me habías prometido,
porque mis ojos han visto a tu Salvador,
al que has preparado para bien de todos los pueblos;
luz que alumbra a las naciones
y gloria de tu pueblo, Israel».
El padre y la madre del niño estaban admirados de semejantes palabras. Simeón los bendijo, y a María, la madre de Jesús, le anunció: «Este niño ha sido puesto para ruina y resurgimiento de muchos en Israel, como signo que provocará contradicción, para que queden al descubierto los pensamientos de todos los corazones. Y a ti, una espada te atravesará el alma».
Homilía de hoy Lunes 29 de Diciembre.
Homilía: La presentación del Señor en el Templo.
El Evangelio de hoy nos presenta el momento sublime en que María y José llevan al Niño Jesús al Templo de Jerusalén para cumplir las prescripciones de la Ley mosaica. Este acto de obediencia religiosa encierra un significado profundísimo: el Señor del universo, por quien y para quien todo fue creado, se somete humildemente a las disposiciones legales, manifestando así su solidaridad perfecta con la condición humana.
La Sagrada Familia se presenta ante Dios con la ofrenda de los pobres: un par de tórtolas o pichones. Esta pobreza material contrasta admirablemente con la riqueza espiritual que portan en sus brazos. El Niño que llevan es el tesoro infinito, la perla preciosa por la cual vale la pena renunciar a todo. Su humildad nos enseña que la verdadera grandeza no reside en las posesiones materiales sino en la docilidad al designio divino.
Simeón, varón justo animado por el Espíritu Santo, reconoce en aquel Niño al Mesías esperado. Su cántico rebosa de alegría y paz: ahora puede partir en paz porque sus ojos han contemplado la salvación preparada para todos los pueblos. Cristo no viene exclusivamente para Israel, sino como luz que ilumina a todas las naciones y gloria de su pueblo.
Sin embargo, la profecía de Simeón también anuncia el sufrimiento. Este Niño está destinado a ser signo de contradicción; muchos se opondrán a Él, y una espada atravesará el alma de su Madre. La salvación que trae no será triunfalista ni cómoda, sino que pasará necesariamente por el misterio pascual de muerte y resurrección.
Que esta contemplación fortalezca nuestra fe y nos prepare para acoger a Cristo con la misma disposición de Simeón, reconociéndolo como Salvador universal..
Evangelio de Hoy – Agradece
Evangelio-de-hoy.com agradece infinitamente al señor nuestro Dios por la fuerza que nos da cada día para seguir adelante. También le damos gracias a De La Mano del Señor por el asesoramiento; y los invitamos a visitar Santo Rosario y Evangelio de hoy para ver el Evangelio y Homilía de Hoy en video.
Los textos de la Sagrada Escritura utilizados en esta obra han sido tomados de los Leccionarios I, II y III, propiedad de la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica de la Conferencia Episcopal Mexicana, copyright © 1987, quinta edición de septiembre de 2004. Utilizados con permiso. Todos los derechos reservados. Debido a cuestiones de permisos de impresión, los Salmos Responsoriales que se incluyen aquí son los del Leccionario que se utiliza en México. Su parroquia podría usar un texto diferente.



