Evangelio de Hoy Jueves 10 de Octubre.

Como todos los días, hoy les traemos a ustedes la palabra del señor. Lecturas, Salmo, Aclamación, el Evangelio de Hoy Jueves 10 de Octubre y la homilía diaria.

Al final del artículo encontraran la homilía del Evangelio del día de hoy para todos aquellos que quieran leer una explicación o comentario del evangelio y las homilías diarias.

Jueves de la XXVII Semana del Tiempo Ordinario – Lectio Divina 464

Lecturas Bíblicas del día de Hoy

Primera Lectura de Hoy

Carta de San Pablo a los Gálatas 3, 1-5.

¡Insensatos gálatas! ¿Quién los ha ofuscado para que no le hagan caso a la verdad, siendo así que les hemos presentado vivamente a Jesucristo clavado en la cruz?

Sólo quiero preguntarles una cosa: ¿Han recibido el Espíritu Santo por haber hecho lo que manda la ley de Moisés o por haber creído en el Evangelio? ¿Tan insensatos son ustedes, que, habiendo comenzado movidos por el Espíritu, quieren terminar haciendo obras meramente humanas? ¿Han recibido en vano tantos favores? Espero que no.

Vamos a ver: cuando Dios les comunica el Espíritu Santo y obra prodigios en ustedes, ¿lo hace porque ustedes han cumplido lo que manda la ley de Moisés, o porque han creído en el Evangelio?


Salmo Responsorial de HoyLucas 1, 69-70. 71-71. 73-75.

El Señor ha hecho surgir en favor nuestro
un poderoso salvador en la casa de David su siervo.
Así lo había anunciado desde antiguo,
por poca de sus santos profetas.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel.

Anunció que nos salvaría de nuestros enemigos
y de las manos de todos los que nos aborrecen,
para mostrar su misericordia a nuestros padres,
y acordarse de su santa alianza.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel.

El Señor juró a nuestro padre Abraham
concedernos que, libres ya de nuestros enemigos,
le sirvamos sin temor, en santidad y justicia,
delante de él, todos los días de nuestra vida.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel.


Aclamación antes del Evangelio

Aleluya, aleluya.
Abre, Señor, nuestros corazones,
para que comprendamos las palabras de tu Hijo.
Aleluya.


Evangelio de Hoy Jueves 10 de Octubre de 2024

Evangelio según San Lucas 11, 5-13.

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Supongan que alguno de ustedes tiene un amigo que viene a medianoche a decirle: ‘Préstame, por favor, tres panes, pues un amigo mío ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle’.

Pero él le responde desde dentro: ‘No me molestes. No puedo levantarme a dártelos, porque la puerta ya está cerrada y mis hijos y yo estamos acostados’. Si el otro sigue tocando, yo les aseguro que, aunque no se levante a dárselos por ser su amigo, sin embargo, por su molesta insistencia, sí se levantará y le dará cuanto necesite.

Así también les digo a ustedes: Pidan y se les dará, busquen y encontrarán, toquen y se les abrirá. Porque quien pide, recibe; quien busca, encuentra y al que toca, se le abre. ¿Habrá entre ustedes algún padre que, cuando su hijo le pida pan, le dé una piedra? ¿O cuando le pida pescado, le dé una víbora? ¿O cuando le pida huevo, le dé un alacrán?

Pues, si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¿cuánto más el Padre celestial les dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan?’’


Homilía de hoy Jueves 10 de Octubre.

El Evangelio de hoy profundiza en la enseñanza de Jesús sobre la oración, presentándonos una parábola que ilustra la importancia de la perseverancia y la confianza en nuestra relación con Dios Padre.

La escena del amigo inoportuno que llama a medianoche nos resulta familiar y provocadora. En ella, Jesús nos muestra que la insistencia en la oración no es señal de falta de fe, sino expresión de una confianza profunda en la bondad de Dios. La perseverancia en la petición no es para convencer a Dios, sino para preparar nuestro corazón para recibir sus dones.

La progresión «pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá» nos invita a una oración activa y comprometida. No se trata de una fórmula mágica, sino de una disposición del corazón que nos mantiene en diálogo constante con Dios. Esta triple invitación nos recuerda que la oración es un camino de búsqueda, un peregrinar en la fe.

Jesús utiliza la imagen de los padres terrenales para ilustrar la bondad infinita del Padre celestial. Si nosotros, siendo imperfectos, sabemos dar cosas buenas a nuestros hijos, ¡cuánto más nuestro Padre del cielo! Esta comparación nos revela el corazón paternal de Dios y nos anima a confiar plenamente en su providencia amorosa.

La mención específica del Espíritu Santo como el don por excelencia nos recuerda que la verdadera oración no busca principalmente bienes materiales, sino la presencia transformadora de Dios en nuestra vida. El Espíritu Santo es el regalo que supera todas nuestras expectativas y necesidades.

Este Evangelio nos interpela: ¿Oramos con la confianza y la perseverancia que Jesús nos enseña? ¿Somos capaces de mantener viva nuestra fe cuando las respuestas parecen tardar? ¿Reconocemos la acción del Espíritu Santo como el don más precioso que podemos recibir?

Que estas enseñanzas de Jesús nos animen a renovar nuestra vida de oración, a perseverar en la confianza y a abrirnos a la acción del Espíritu Santo. Que aprendamos a ver en cada oración no respondida una invitación a profundizar nuestra relación con el Padre, confiando en que Él sabe lo que verdaderamente necesitamos.


Evangelio de Hoy – Agradece Por el Evangelio y La Homilía de Hoy

Evangelio-de-hoy.com agradece infinitamente al señor nuestro Dios por la fuerza que nos da cada día para seguir adelante. También le damos gracias a De La Mano del Señor por el asesoramiento y los invitamos a visitar Santo Rosario y Evangelio de hoy para ver el Evangelio de Hoy en video.

Los textos de la Sagrada Escritura utilizados en esta obra han sido tomados de los Leccionarios I, II y III, propiedad de la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica de la Conferencia Episcopal Mexicana, copyright © 1987, quinta edición de septiembre de 2004. Utilizados con permiso. Todos los derechos reservados. Debido a cuestiones de permisos de impresión, los Salmos Responsoriales que se incluyen aquí son los del Leccionario que se utiliza en México. Su parroquia podría usar un texto diferente.