Evangelio de Hoy Lunes 20 de Febrero .

Como todos los días, hoy les traemos a ustedes la palabra del señor. Lecturas, Salmo, Aclamación, el Evangelio de Hoy Lunes 20 de Febrero y la homilía diaria.

Al final del artículo encontrarán el comentario al Evangelio del día de hoy para todos aquellos que quieran leer una explicación del evangelio, y las homilías diarias.

Lunes de la VII semana del tiempo ordinario- Lectio Divina 341

Lecturas Bíblicas del día de Hoy

Primera Lectura de Hoy

Libro de Eclesiástico 1,1-10.

Toda sabiduría proviene del Señor
y está con él eternamente.
¿Quién puede contar las arenas de la playa,
las gotas de la lluvia o los días de los siglos?
¿Quién puede explorar la altura del cielo,
la extensión de la tierra y la profundidad de los abismos?

Antes que cualquier otra cosa fue creada la sabiduría;
y la luz de la inteligencia, desde la eternidad.
¿A quién se le ha revelado la fuente de la sabiduría?
¿Quién ha conocido sus recursos inagotables?
Uno solo es sabio, temible en extremo:
el que está sentado en su trono, el Señor.
Él creó la sabiduría, la contempló y la midió;
la ha derramado sobre todas sus obras
y sobre todos los hombres, según su generosidad;
la ha derrochado entre aquellos que lo aman.


Salmo Responsorial de Hoy Salmo 92, 1ab. 1c-2. 5.

Tú eres, Señor, el rey de todos los reyes.
Estás revestido de poder y majestad.
Tú mantienes el orbe y no vacila.
Eres eterno, y para siempre está firme tu trono.
El Señor es un rey magnífico.

Muy dignas de confianza son tus leyes
y desde hoy y para siempre, Señor,
la santidad adorna tu templo.
El Señor es un rey magnífico.


Aclamación antes del Evangelio

Aleluya, aleluya.
Jesucristo, nuestro Salvador, ha vencido la muerte
y ha hecho resplandecer la vida por medio del Evangelio.
Aleluya.


Evangelio de Hoy Lunes 20 de Febrero de 2023.

Evangelio según San Marcos 9, 14-29.

En aquel tiempo, cuando Jesús bajó del monte y llegó al sitio donde estaban sus discípulos, vio que mucha gente los rodeaba y que algunos escribas discutían con ellos. Cuando la gente vio a Jesús, se impresionó mucho y corrió a saludarlo.

Él les preguntó: «¿De qué están discutiendo?» De entre la gente, uno le contestó: «Maestro, te he traído a mi hijo, que tiene un espíritu que no lo deja hablar; cada vez que se apodera de él, lo tira al suelo y el muchacho echa espumarajos, rechina los dientes y se queda tieso. Les he pedido a tus discípulos que lo expulsen, pero no han podido».

¡Gente incrédula!

Jesús les contestó: «¡Gente incrédula! ¿Hasta cuándo tendré que estar con ustedes? ¿Hasta cuándo tendré que soportarlos? Tráiganme al muchacho». Y se lo trajeron. En cuanto el espíritu vio a Jesús, se puso a retorcer al muchacho; lo derribó por tierra y lo revolcó, haciéndolo echar espumarajos.

Jesús le preguntó al padre: «¿Cuánto tiempo hace que le pasa esto?» Contestó el padre: «Desde pequeño. Y muchas veces lo ha arrojado al fuego y al agua para acabar con él. Por eso, si algo puedes, ten compasión de nosotros y ayúdanos».

Jesús le replicó: «¿Qué quiere decir eso de ‘si puedes’? Todo es posible para el que tiene fe». Entonces el padre del muchacho exclamó entre lágrimas: «Creo, Señor; pero dame tú la fe que me falta».

Jesús, al ver que la gente acudía corriendo, reprendió al espíritu inmundo, diciéndole: «Espíritu mudo y sordo, yo te lo mando: Sal de él y no vuelvas a entrar en él». Entre gritos y convulsiones violentas salió el espíritu. El muchacho se quedó como muerto, de modo que la mayoría decía que estaba muerto. Pero Jesús lo tomó de la mano, lo levantó y el muchacho se puso de pie.

Al entrar en una casa con sus discípulos, éstos le preguntaron a Jesús en privado: «¿Por qué nosotros no pudimos expulsarlo?» Él les respondió: «Esta clase de demonios no sale sino a fuerza de oración y de ayuno».


Comentario y Homilía del Evangelio de hoy Lunes 20 de Febrero .

Beato Columba Marmion (1858-1923)

“Creo, ayúdame porque tengo poca fe”

Para creer, es necesaria la acción de la gracia y de la voluntad. Lean el Evangelio. Sus contemporáneos han podido tocar a Jesús, escucharlo. Sus sentidos lo captaban, la razón mostraba que era un hombre eminente, de gran virtud.

Pero para penetrar hasta el santo de santos del ser divino y creer que era el verdadero Hijo de Dios, además de milagros y profecías, era necesario un don de la gracia. Jesús lo afirmó “porque esto no te lo ha revelado ni la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en el cielo”.

Y en otra ocasión “Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre que me envió”. La fe nos viene de lo Alto. Nosotros, teniendo ese don de Dios, debemos pedir su crecimiento:

“Creo, ayúdame porque tengo poca fe” . Las tentaciones contra la fe siempre son posibles, pero ellas se convierten en un estimulo de la oración. Ellas rinden nuestra fe más viva y podemos apreciar mejor su carácter sobrenatural y gratuito. (…)

Aprendamos a utilizar estas vacilaciones, adhiramos con más conciencia y firmeza a Cristo y su mensaje.


Evangelio de Hoy – Agradece

Evangelio-de-hoy.com agradece infinitamente al señor nuestro Dios por la fuerza que nos da cada día para seguir adelante. También le damos gracias a De La Mano del Señor por el asesoramiento; y los invitamos a visitar Santo Rosario y Evangelio de hoy para ver el Evangelio y Homilía de Hoy en video.

Los textos de la Sagrada Escritura utilizados en esta obra han sido tomados de los Leccionarios I, II y III, propiedad de la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica de la Conferencia Episcopal Mexicana, copyright © 1987, quinta edición de septiembre de 2004. Utilizados con permiso. Todos los derechos reservados. Debido a cuestiones de permisos de impresión, los Salmos Responsoriales que se incluyen aquí son los del Leccionario que se utiliza en México. Su parroquia podría usar un texto diferente.