Evangelio de Hoy Viernes 18 de Octubre de 2024.
Como todos los días, hoy les traemos a ustedes la palabra del señor. Lecturas, Salmo, Aclamación, el Evangelio de Hoy Viernes 18 de Octubre y la homilía diaria.
Al final del artículo encontraran el comentario del Evangelio del día de hoy para todos aquellos que quieran leer una explicación del evangelio, y las homilías diarias.
Fiesta de San Lucas, evangelista –Lectio Divina 661
Lecturas Bíblicas del día de Hoy
Primera Lectura de Hoy
Segunda Carta de San Pablo a Timoteo 4, 10-17.
Querido hermano: Haz lo posible por venir a verme cuanto antes, pues Dimas, prefiriendo las cosas de este mundo, me ha abandonado y ha partido a Tesalónica. Crescencio se fue a Galacia, y Tito, a Dalmacia. El único que me acompaña es Lucas. Trae a Marcos contigo, porque me será muy útil en mis tareas. A Tíquico lo envié a Éfeso.
Cuando vengas, tráeme el abrigo que dejé en Tróade, en la casa de Carpo. Tráeme también los libros y especialmente los pergaminos.
Alejandro, el herrero, me ha hecho mucho daño. El Señor le dará su merecido. Cuídate de él, pues se ha opuesto tenazmente a nuestra predicación.
La primera vez que me defendí ante el tribunal, nadie me ayudó. Todos me abandonaron. Que no se les tome en cuenta. Pero el Señor estuvo a mi lado y me dio fuerzas para que, por mi medio, se proclamara claramente el mensaje de salvación y lo oyeran todos los paganos.
Salmo Responsorial de Hoy – Salmo 144, 10-11. 12-13. 17-18.
Que te alaben, Señor, todas tus obras
y que todos tus fieles te bendigan.
Que proclamen la gloria de tu reino
y den a conocer tus maravillas.
Señor, que todos tus fieles te bendigan.
Que muestren a los hombres tus proezas,
el esplendor y la gloria de tu reino.
Tu reino, Señor, es para siempre
y tu imperio, por todas las generaciones.
Señor, que todos tus fieles te bendigan.
Siempre es justo el Señor en sus designios
y están llenos de amor todas sus obras.
No está lejos de aquellos que lo buscan;
muy cerca está el Señor, de quien lo invoca.
Señor, que todos tus fieles te bendigan.
Aclamación antes del Evangelio
Aleluya, aleluya.
Yo los he elegido del mundo, dice el Señor,
para que vayan y den fruto y su fruto permanezca.
Aleluya.
Evangelio de Hoy Viernes 18 de Octubre de 2024
Evangelio según San Lucas 10, 1-9.
En aquel tiempo, Jesús designó a otros setenta y dos discípulos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares a donde pensaba ir, y les dijo: «La cosecha es mucha y los trabajadores pocos. Rueguen, por lo tanto, al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus campos. Pónganse en camino; yo los envío como corderos en medio de lobos.
No lleven ni dinero ni morral ni sandalias y no se detengan a saludar a nadie por el camino. Cuando entren en una casa digan: ‘Que la paz reine en esta casa’. Y si allí hay gente amante de la paz, el deseo de paz de ustedes se cumplirá; si no, no se cumplirá. Quédense en esa casa. Coman y beban de lo que tengan, porque el trabajador tiene derecho a su salario. No anden de casa en casa.
En cualquier ciudad donde entren y los reciban, coman lo que les den. Curen a los enfermos que haya y díganles: ‘Ya se acerca a ustedes el Reino de Dios’ «.
Homilía de hoy Viernes 18 de Octubre.
El pasaje del Evangelio de hoy nos presenta la misión de los setenta y dos discípulos que Jesús envía de dos en dos a las ciudades y pueblos a proclamar la cercanía del Reino de Dios. Este texto nos ofrece profundas enseñanzas sobre la misión de la Iglesia y el modo en que estamos llamados a vivir nuestra vocación de evangelizadores.
Jesús comienza instruyendo a sus discípulos sobre la urgencia de la misión: “La cosecha es abundante, pero los trabajadores son pocos. Rueguen al dueño de la cosecha que envíe trabajadores a recogerla.” Con estas palabras, Jesús nos recuerda que la misión de llevar el Evangelio al mundo es vasta y urgente. Hay muchas almas que están listas para recibir la Palabra de Dios, pero los obreros, aquellos dispuestos a entregarse a esta labor, son pocos. Aquí, Jesús nos invita a orar, no solo por los frutos de la evangelización, sino especialmente por vocaciones: necesitamos más discípulos que, movidos por el Espíritu Santo, lleven el mensaje de Cristo a los corazones que anhelan ser alcanzados por su amor.
Luego, Jesús les da una advertencia solemne: “¡Los envío como corderos en medio de lobos!” Esta imagen de fragilidad nos recuerda que la misión no siempre será fácil ni cómoda. El discípulo de Cristo enfrenta la hostilidad del mundo, las resistencias al Evangelio, y las pruebas que vienen con el anuncio de la verdad. Sin embargo, Jesús no nos deja solos: nos envía con la fuerza de su gracia y su presencia. Nuestra confianza no está en nuestras propias capacidades, sino en el poder del Señor que nos acompaña.
A continuación, Jesús da una instrucción sorprendente: “No lleven bolsa, ni alforja, ni sandalias, y no se detengan a saludar a nadie por el camino.” Esta indicación subraya la sencillez y la dependencia total en Dios que deben caracterizar a los evangelizadores. Los discípulos no deben preocuparse por lo material, porque el Señor proveerá todo lo necesario. Están llamados a confiar radicalmente en la providencia divina, sabiendo que la misión no depende de los medios humanos, sino de la acción de Dios en sus vidas. Esta actitud de desprendimiento es esencial para que el corazón esté plenamente disponible para la tarea de anunciar el Reino.
Al llegar a una casa, Jesús les enseña a decir: “La paz sea con esta casa.” Esta paz es más que un simple saludo: es la paz de Dios que los discípulos llevan consigo, una paz que transforma y sana. Los discípulos son portadores de la paz que solo Cristo puede dar, una paz que restaura las relaciones y abre el corazón a la acción de Dios. Jesús nos invita a ser embajadores de esta paz en nuestras propias vidas, llevándola a nuestras familias, comunidades y a todos aquellos con quienes nos encontremos.
Finalmente, Jesús les manda a proclamar un mensaje claro y directo: “El Reino de Dios está cerca de ustedes.” Este es el corazón de la misión cristiana: anunciar que Dios ha venido a nuestro encuentro, que su Reino está presente y activo en el mundo, y que estamos llamados a formar parte de él. El Reino de Dios no es una realidad distante, sino algo que ya está en medio de nosotros, manifestado en la persona de Jesús y en su obra de salvación. Como discípulos de Cristo, estamos llamados a ser testigos de este Reino, a mostrar con nuestras vidas que el amor, la justicia, la paz y la misericordia de Dios están presentes y actuando en el mundo.
Este Evangelio es una invitación para todos nosotros a participar activamente en la misión de la Iglesia. Todos, sin excepción, somos llamados a ser discípulos misioneros. Esto no significa que todos debemos dejar nuestras ocupaciones y salir a evangelizar en lugares lejanos, pero sí que estamos llamados a ser testigos del Evangelio en nuestras propias vidas, en nuestros entornos cotidianos, con nuestras palabras y acciones.
Pidamos al Señor que nos conceda el celo misionero que Él desea para su Iglesia, un corazón dispuesto a compartir la Buena Nueva con generosidad y valentía. Que confiemos en su providencia, llevando su paz a todos los que nos rodean, y proclamando con alegría que el Reino de Dios está entre nosotros.
Que María, Reina de los Apóstoles, interceda por nosotros, para que seamos fieles a nuestra misión de discípulos y testigos del Reino.
Evangelio de Hoy – Agradece Por el Evangelio y La Homilía de Hoy
Evangelio-de-hoy.com agradece infinitamente al señor nuestro Dios por la fuerza que nos da cada día para seguir adelante. También le damos gracias a De La Mano del Señor por el asesoramiento y los invitamos a visitar Santo Rosario y Evangelio de hoy para ver el Evangelio y la Homilía de Hoy en video.
Los textos de la Sagrada Escritura utilizados en esta obra han sido tomados de los Leccionarios I, II y III, propiedad de la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica de la Conferencia Episcopal Mexicana, copyright © 1987, quinta edición de septiembre de 2004. Utilizados con permiso. Todos los derechos reservados. Debido a cuestiones de permisos de impresión, los Salmos Responsoriales que se incluyen aquí son los del Leccionario que se utiliza en México. Su parroquia podría usar un texto diferente.