Evangelio de Hoy Jueves 1 de Agosto.
Como todos los días, hoy les traemos a ustedes la palabra del señor. Lecturas, Salmo, Aclamación, el Evangelio de Hoy Jueves 1 de Agosto y la homilía diaria.
Al final del artículo encontraran la homilía del Evangelio del día de hoy para todos aquellos que quieran leer una explicación o comentario del evangelio y las homilías diarias.
Memoria de San Alfonso María de Ligorio – Lectio Divina 404
Lecturas Bíblicas del día de Hoy
Primera Lectura de Hoy
Libro de Jeremías 18, 1-6.
Esto es lo que el Señor me dijo: “Jeremías, ve a la casa del alfarero y ahí te haré oír mis palabras”.
Fui, pues, a la casa del alfarero y lo hallé trabajando en su torno. Cuando se le estropeaba la vasija que estaba modelando, volvía a hacer otra con el mismo barro, como mejor le parecía.
Entonces el Señor me dijo: “¿Acaso no puedo hacer yo con ustedes, casa de Israel, lo mismo que hace este alfarero? Como está el barro en las manos del alfarero, así ustedes, casa de Israel, están en mis manos”.
Salmo Responsorial de Hoy – Salmo 145, 2abc. 2d-4. 5-6.
Alaba, alma mía, al Señor:
alabaré al Señor toda mi vida;
tocaré y cantaré para mi Dios,
mientras yo exista.
Dichoso el que espera en el Señor.
No pongas tu confianza en los que mandan
Ni en el mortal, que no puede salvarte;
pues cuando mueren, se convierten en polvo
y ese mismo día se acaban sus proyectos.
Dichoso el que espera en el Señor.
Dichoso aquel que es auxiliado
por el Dios de Jacob
y pone su esperanza
en el Señor, su Dios,
que hizo el cielo y la tierra,
el mar y cuanto el mar encierra.
Dichoso el que espera en el Señor.
Aclamación antes del Evangelio
Aleluya, aleluya.
Abre, Señor, nuestros corazones
para que comprendamos las palabras de tu Hijo.
Aleluya.
Evangelio de Hoy Jueves 1 de Agosto de 2024
Evangelio según San Mateo 13, 47-53.
En aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud: “El Reino de los cielos se parece también a la red que los pescadores echan en el mar y recoge toda clase de peces. Cuando se llena la red, los pescadores la sacan a la playa y se sientan a escoger los pescados; ponen los buenos en canastos y tiran los malos. Lo mismo sucederá al final de los tiempos: vendrán los ángeles, separarán a los malos de los buenos y los arrojarán al horno encendido. Allí será el llanto y la desesperación.
¿Han entendido todo esto?’’ Ellos le contestaron: “Sí”. Entonces él les dijo: “Por eso, todo escriba instruido en las cosas del Reino de los cielos es semejante al padre de familia, que va sacando de su tesoro cosas nuevas y cosas antiguas”.
Y cuando acabó de decir estas parábolas, Jesús se marchó de allí.
Homilía de hoy Jueves 1 de Agosto.
El pasaje del Evangelio que hoy meditamos nos presenta la parábola de la red echada al mar, seguida de una conclusión sobre las enseñanzas de Jesús acerca del Reino de los Cielos. Esta enseñanza nos ofrece una profunda reflexión sobre el juicio final y la importancia de comprender y vivir las verdades del Reino.
La parábola de la red nos muestra una imagen familiar para los discípulos, muchos de los cuales eran pescadores. Jesús compara el Reino de los Cielos con una red que se echa al mar y recoge peces de toda clase. Esta imagen nos habla de la universalidad del llamado de Dios: el Evangelio se ofrece a todos, sin distinción.
Sin embargo, la parábola no se detiene en la pesca, sino que continúa con la selección de los peces. Los pescadores separan los buenos de los malos, guardando los primeros y desechando los segundos. Jesús explica que esto representa el juicio final, donde los ángeles separarán a los malos de entre los justos.
Esta enseñanza nos recuerda varias verdades importantes:
La coexistencia temporal del bien y el mal: En la Iglesia y en el mundo, los justos y los injustos coexisten por ahora. Esta realidad nos llama a la paciencia y a evitar juicios apresurados.
La certeza del juicio final: Habrá un momento en que Dios separará definitivamente el bien del mal. Esta verdad nos invita a vivir con responsabilidad, conscientes de que nuestras acciones tienen consecuencias eternas.
La seriedad de nuestras decisiones morales: La descripción del destino de los malvados es una advertencia solemne sobre la importancia de vivir según los valores del Reino.
Después de esta parábola, Jesús pregunta a sus discípulos si han entendido todo esto. Su respuesta afirmativa nos lleva a reflexionar sobre nuestra propia comprensión de las enseñanzas de Cristo. ¿Realmente entendemos las implicaciones de vivir como ciudadanos del Reino de Dios?
La conclusión de este pasaje es particularmente interesante. Jesús compara a todo escriba que se ha hecho discípulo del Reino de los Cielos con un padre de familia que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas antiguas. Esta imagen nos habla de la riqueza de la tradición cristiana, que integra lo antiguo (la ley y los profetas) con lo nuevo (la enseñanza de Cristo).
Que esta enseñanza nos inspire a profundizar en nuestra comprensión del Reino de Dios. Pidamos al Espíritu Santo que nos ayude a discernir y vivir los valores del Reino en nuestra vida cotidiana.
Finalmente, que nuestra vida sea un testimonio vivo del Reino de Dios, invitando a otros a descubrir el tesoro incomparable que hemos encontrado en Cristo. Amén.
Evangelio de Hoy – Agradece Por el Evangelio y La Homilía de Hoy
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Los textos de la Sagrada Escritura utilizados en esta obra han sido tomados de los Leccionarios I, II y III, propiedad de la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica de la Conferencia Episcopal Mexicana, copyright © 1987, quinta edición de septiembre de 2004. Utilizados con permiso. Todos los derechos reservados. Debido a cuestiones de permisos de impresión, los Salmos Responsoriales que se incluyen aquí son los del Leccionario que se utiliza en México. Su parroquia podría usar un texto diferente.
