Evangelio de Hoy Lunes 17 de Febrero.

Como todos los días, hoy les traemos a ustedes la palabra del señor. Lecturas, Salmo, Aclamación, el Evangelio de Hoy Lunes 17 de Febrero y la homilía diaria.

Al final del artículo encontrarán el comentario al Evangelio del día de hoy para todos aquellos que quieran leer una explicación del evangelio, y las homilías diarias.

Lunes de la VI semana del tiempo ordinario – Lectio Divina 335

Lecturas Bíblicas del día de Hoy

Primera Lectura de Hoy

Libro del Génesis 4, 1-15. 25.

En aquel tiempo, Adán se unió con Eva, su mujer; ella concibió y dio a luz a Caín, pues decía: «Con el favor de Dios he engendrado un hijo». Después de algún tiempo dio a luz al hermano de Caín, Abel. Abel fue pastor de ovejas, y Caín labrador.

Sucedió en una ocasión, que Caín presentó como ofrenda al Señor los productos de la tierra. También Abel le hizo una ofrenda: sacrificó las primeras crías de sus ovejas y quemó su grasa. Al Señor le agradaron las ofrendas de Abel, pero no le agradaron las de Caín; por lo cual, Caín se enfureció y andaba resentido. El Señor le dijo entonces a Caín: «¿Por qué te enfureces tanto y andas resentido? Si hicieras el bien, te sentirías feliz; pero si haces el mal, el pecado estará a tu puerta, acechándote como fiera; pero tú debes dominarlo».

Un día Caín le dijo a su hermano Abel: «Vamos al campo». Y cuando estaban en el campo, Caín se lanzó contra su hermano y lo mató. Entonces el Señor le preguntó a Caín: «¿Dónde está Abel, tu hermano?» Caín le respondió: «No lo sé. ¿Acaso soy yo el guardián de mi hermano?» El Señor le dijo: «¿Qué es lo que has hecho? ¿No oyes cómo la sangre de tu hermano está clamando a mí desde la tierra? Por eso serás maldito y tendrás que vivir lejos de la tierra que recibió de ti la sangre de tu hermano; y aunque cultives la tierra, ella no volverá a darte frutos abundantes. Tú andarás por el mundo errante y fugitivo».

Caín le contestó al Señor: «Mi castigo es demasiado grande para soportarlo. Puesto que tú me arrojas de esta tierra fértil, tendré que ocultarme de ti y andar errante y fugitivo por el mundo, y cualquiera que me encuentre, me matará». El Señor le dijo: «De ninguna manera. El que te mate a ti será castigado siete veces». Y el Señor le puso una señal a Caín para que, si alguien lo encontraba, no lo matara.

Adán se unió otra vez a su mujer, y ella dio a luz un hijo, a quien llamó Set, pues decía: «El Señor me ha dado otro hijo en lugar de Abel, asesinado por Caín».


Salmo Responsorial de Hoy Salmo 49, 1 y 8. 16bc-17. 20-21.

Habla el Dios de los dioses, el Señor,
y convoca a cuantos viven en la tierra
del oriente al poniente:
«No voy a reclamarte sacrificios,
pues siempre están ante mí tus holocaustos.
Te ofreceremos, Señor, sacrificios de alabanza.

¿Por qué citas mis preceptos,
y hablas a toda hora de mi pacto,
tú que detestas la obediencia
y echas en saco roto mis mandatos?
Te ofreceremos, Señor, sacrificios de alabanza.

Te pones a insultar a tu hermano,
y deshonras al hijo de tu madre;
Tú haces esto, ¿y yo tengo que callarme?
¿Crees acaso que yo soy como tú?
No, yo te reprenderé y te echaré en cara tus pecados».
Te ofreceremos, Señor, sacrificios de alabanza.


Aclamación antes del Evangelio

Aleluya, aleluya.
Yo soy el camino, la verdad y la vida;
nadie va al Padre si no es por mí, dice el Señor.
Aleluya.


Evangelio de Hoy Lunes 17 de Febrero de 2025.

Evangelio según San Marcos 8, 11-13.

En aquel tiempo, se acercaron a Jesús los fariseos y se pusieron a discutir con él, y para ponerlo a prueba, le pedían una señal del cielo. Jesús suspiró profundamente y dijo: «¿Por qué esta gente busca una señal? Les aseguro que a esta gente no se le dará ninguna señal».

Entonces los dejó, se embarcó de nuevo y se fue a la otra orilla.


Homilía de hoy Lunes 17 de Febrero.

En este breve pero significativo pasaje del evangelio, contemplamos un momento de profunda tensión espiritual. Los fariseos, buscando poner a prueba a Jesús, le piden una señal del cielo. La respuesta del Señor, manifestada en su suspiro profundo y su partida, nos revela importantes verdades sobre la fe y la incredulidad.

¿Cuántas señales más necesitaban ver? Ya habían presenciado curaciones, multiplicación de panes, expulsión de demonios, y aun así, su corazón permanecía cerrado. Su petición no nacía de un deseo sincero de creer, sino de la voluntad de poner a prueba a Dios. Este «suspiro profundo» de Jesús nos revela su dolor ante la dureza del corazón humano.

En nuestra vida cotidiana, ¿cuántas veces caemos en la misma actitud? Pedimos señales, pruebas, evidencias, cuando la verdadera fe no se construye sobre exigencias sino sobre la confianza. El Señor ya nos ha dado la señal definitiva en su muerte y resurrección, y sin embargo, como aquellos fariseos, seguimos pidiendo más.

La partida de Jesús «a la otra orilla» no es un acto de resignación, sino una enseñanza. Nos muestra que la fe auténtica no depende de señales extraordinarias, sino de un corazón abierto a reconocer la presencia de Dios en lo ordinario de la vida. La verdadera señal está en la transformación interior que produce el encuentro con Cristo.

Pidamos al Señor que nos conceda un corazón dócil, capaz de reconocer su presencia en cada momento de nuestra vida, sin exigir señales extraordinarias, confiando en su amor manifestado en la cotidianidad de nuestros días.


Evangelio de Hoy – Agradece

Evangelio-de-hoy.com agradece infinitamente al señor nuestro Dios por la fuerza que nos da cada día para seguir adelante. También le damos gracias a De La Mano del Señor por el asesoramiento; y los invitamos a visitar Santo Rosario y Evangelio de hoy para ver el Evangelio y Homilía de Hoy en video.

Los textos de la Sagrada Escritura utilizados en esta obra han sido tomados de los Leccionarios I, II y III, propiedad de la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica de la Conferencia Episcopal Mexicana, copyright © 1987, quinta edición de septiembre de 2004. Utilizados con permiso. Todos los derechos reservados. Debido a cuestiones de permisos de impresión, los Salmos Responsoriales que se incluyen aquí son los del Leccionario que se utiliza en México. Su parroquia podría usar un texto diferente.